Es importante seguir las indicaciones dadas por el doctor al momento del alta y respetar los tiempos de reposo indicados, suele ser suficiente para ayudar a el cuerpo a su nuevo estado y recuperar gradual mente la actividad.
1.- Prepararse.
Ser previsor y organizado con antelación aquellas tareas que durante el periodo de recuperación no va a ser posible atender, es fundamental para que una vez en casas no tengamos que preocuparnos más que de descansar.

No hay que olvidar que realizar cualquier actividad sin haber respetado el reposo indicado puede perjudicar el proceso de curación y provocar riesgo innecesario.

2.-Descansar.
El descanso es importante tras una cirugía. Habitualmente es el propio cuerpo el que nos demanda el grado de reposo que necesita para su recuperación, y esto va asociado al tipo de intervención que se realiza. El grado de actividad y las necesidades de descanso varían según las personas, pero se aconseja descansar lo máximo posible, especialmente los primeros días tras la intervención.

El cirujano le indicará el nivel de esfuerzo que puede realizar. En términos generales, tras la mayor parte de las intervenciones, los pacientes pueden realizar una actividad física de grado leve a moderado (como salir a pasear) al cabo de 24 a 48 horas tras la cirugía. Este tipo de actividad es incluso aconsejable tras algunos procedimientos.

3.-Crear una zona de confort.
Conviene asegurarse de tener un entorno lo más cómodo posible. En el caso de las cirugías faciales es aconsejable mantener la cabeza elevada y en las cirugías corporales evitar determinadas posiciones. Pero eso no impide que busquemos la manera en que el descanso se realice en las mejores condiciones posibles; por ejemplo, no es necesario mantenerse siempre “boca arriba” en la cama, quienes estén habituados a descansar en una postura lateral podrán hacerlo cuidando algunos aspectos.

El grado de incomodidad tras una cirugía dependerá del tipo de procedimiento, y las características del paciente. Si bien el umbral del dolor es variable, la gran mayoría de los pacientes consideran las molestias del postoperatorio tolerables, y sólo precisan algún tipo de analgésico los días posteriores a la intervención.

4. Esperar un tiempo prudencial para hacer ejercicio físico
La condición física del paciente y el tipo de cirugía que se haya realizado determinarán cuándo,con qué frecuencia y con qué intensidad se podrá retomar la actividad deportiva. Como promedio, se aconseja esperar unas cuatro semanas para reanudar el ejercicio físico sin restricciones. Lo más recomendable es reanudar la actividad física de forma gradual, y tener en cuenta las indicaciones que le prescriba su cirujano.
5. Confiar en un cuidador
Especialmente en las primeras horas tras el alta, es aconsejable estar acompañado. Incluso en algunas circunstancias, puede estar indicada la ayuda temporal de un cuidador en las tareas de aseo personal, vigilancia nocturna o desplazamientos durante las citas de seguimiento tras una cirugía.
6. Usar una prenda postquirúrgica apropiada
Las prendas de compresión como las fajas postoperatorias o los sostenes post-cirugía están diseñados para facilitar la recuperación tras una intervención, evitando al máximo las molestias. Con este tipo de prendas el paciente se siente más protegido, ya que proporciona el soporte adicional necesario para una adecuada movilidad, asegurando una postura correcta y favoreciendo el reposicionamiento de los tejidos durante la recuperación.

Las prendas de compresión tienen como finalidad ejercer una presión constante en la zona intervenida. Su uso en la fase postoperatoria en procedimientos de cirugía estética corporal como una abdominoplastia o una liposucción contribuye a mantener los tejidos en su lugar y a acelerar el proceso curativo. El grado de tolerancia de las mismas es alto en términos generales, aunque puede variar según los pacientes. Si es necesario modificar de alguna manera el tipo de prenda inicialmente previsto o la forma en que debe de ser usada, será el propio cirujano quien le aconseje al respecto.

De la misma manera, los sujetadores o sostenes que se prescriben para uso posquirúrgico deben de ser suficiente cómodos para no interferir en las actividades cotidianas de los pacientes, a la vez que deben cumplir su misión en el proceso de curación y recuperación, ayudando en la obtención del mejor resultado posible.

7.- Hidratarse.
Es importante mantener una buena hidratación siempre es bueno llevar zumos, agua o bebidas isotónicas recomendamos beber pocas cantidades muchas veces, aunque no apetezca, además, puede ser útil tener pajitas, ya que según la cirugía (por ejemplo una abadominoplastia) no es fácil adaptarse al principio.

Siguiendo estas indicaciones se garantiza una recuperación exitosa